6 de agosto de 2016

Lo mejor de Río 2016 Gisele Bündchen La Garota de Ipanema


Espectáculo aparte, para mí lo mejor de Río 2016 la bellísima modelo Gisele Bündchen, La Garota de Ipanema, un suspiro verla en la pasarela desfilar con todo el glamour de Brasil, y a cada paso que daba la modelo Gisele Bündchen sobre el campo de 100 metros, dejaba líneas de luces que representaban la arquitectura de Oscar Niemeyer.


Fue así que la brasileña le dio un toque de brillo y glamour a la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro y de paso, se despidió de las caminatas de moda ya que fue la última vez que se le verá ejerciendo de modelo de pasarelas.

Oficialmente se había retirado hace un año, pero sólo volvió por escasos segundos a ser la mirada central.

Menos de un minuto en el escenario le fue suficiente a Bündchen para robarse las miradas de los anfitriones con la misma sencillez y sensualidad que derrocha en las pasarelas.


La esposa del quarterback de los Patriotas Tom Brady y madre de dos hijos, ingresó al estadio con los acordes de “La garota de Ipanema”, de Tom Jobim, canción que le valió al cantante brasileño un Grammy en 1965.

La interpretación de la melodía corrió a cargo del nieto de Tom, Daniel Jobim.
Bündchen, hizo su segunda aparición en un evento deportivo de magnitud ya que también fue una de las invitadas de la Copa del Mundo en 2014.

“Esta es la pasarela más larga que he caminado hasta ahora y donde más gente me verá. Es un momento muy especial para mi país y estoy muy agradecida de formar parte de esta celebración”, dijo previo a su caminata.

El atuendo que portó era un vestido de noche dorado con cuello en “v” y pliegue a la altura de la cintura, confeccionado durante cuatro meses por Alexandre Herchcovitch, y que dejaba ver las piernas de la también empresaria de 36 años de edad.


Pero fue la voz de las actrices Fernanda Montenegro, nominada al Oscar en 1999 por Estación central y la inglesa Judi Dench (“M” en la saga de James Bond), las que pusieron toque emotivo al recitar el poema “La flor y la náusea”, de Carlos Drummond, luego de la proyección de un video sobre el cambio climático en el planeta.

El inicio de la ceremonia, cuya dirección artística recayó en el cineasta Fernando Meirelles (Ciudad de Dios), contó con la representación de la flora, fauna y mares, pasando por personajes importantes en la historia brasileña como los grupos étnicos.

El propio realizador había dicho que su idea era mostrar que la única manera de revertir el daño por contaminación, es hacer caso a la naturaleza.

Sergio Mendes cantó “Pais tropical”, al tiempo que bailó con Regina Casé, considerada la reina de la diversidad en el país sudamericano.

Tras el desfile deportivo la samba se apropió del estadio con Wilson Das Neves, exponente del género, seguido por Caetano Veloso, Gilberto Gil y Anitta para interpretar “Sandalia de prata”.