El suceso ocurrido el día de ayer, donde el presidente López Obrador iba bordo de una camioneta del ejército rumbo a Acapulco, y ésta se atascó en la carretera, ha dado lugar a una oleada de memes en las redes sociales. La situación ocurrió cuando el mandatario viajaba para evaluar los daños causados por el huracán Otis, en Guerrero. Por la noche se regresó en helicóptero a la ciudad de México
Las imágenes de la camioneta varada con el presidente dentro se hicieron virales en las redes sociales. De esa forma, desató la creatividad de los usuarios que crearon memes humorísticos.
Los memes se centran en la peculiaridad de la situación y muestran al presidente en situaciones cómicas mientras intenta resolver el problema. A pesar de la situación, el presidente López Obrador tomó la situación con humor y, una vez que el vehículo fue desatascado, continuó a pie con su visita a las zonas afectadas por el huracán Otis.
Debates Sobre las Situaciones Políticas
Los memes han generado debate en línea sobre el uso del humor en situaciones políticas. Algunos los consideran inapropiados, mientras que otros los ven como una forma de aliviar la tensión en momentos difíciles.
La anécdota del vehículo atascado, acompañada de los memes, ha puesto de manifiesto la importancia de la comunicación en la era de las redes sociales y cómo los eventos políticos pueden convertirse en contenido viral.
López Obrador llega a Acapulco vía terrestre y regresa en helicóptero a Ciudad de México
Luego de varias horas de traslado, que incluyó obstáculos en la carretera, el presidente Andrés Manuel López Obrador llegó la tarde de este miércoles al Puerto de Acapulco, el punto turístico más importante del estado de Guerrero, el cual quedó devastado por el golpe del huracán Otis, de categoría 5, la madrugada de este 25 de octubre.
Cerca de las 20:00 horas, AMLO se reunió en compañía de su gabinete de seguridad, con las autoridades guerrerenses, encabezada por la gobernadora Evelyn Salgado, para evaluar los daños del sistema meteorológico.
En el encuentro también estuvieron el secretario de Defensa, Luis Cresencio Sandoval; el de Marina, Rafael Ojeda; de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez; y la coordinadora de Protección Civil Nacional, Laura Velázquez.
Sin embargo, de acuerdo con reportes de la agencia EFE, tras la reunión el presidente decidió regresar a la Ciudad de México en un helicóptero de la Armada de México, pese a que por la mañana explicó que no había condiciones para volar por la lluvia y fuertes vientos.
Se requieren más de las nueve o diez horas que le llevó al presidente López Obrador viajar de Palacio Nacional al devastado Acapulco para intentar descifrar el misterio detrás del absurdo de que viajara por tierra en tres distintos vehículos y pasara el bochorno de quedar varado en dos ocasiones.
En el soleado mediodía, bien pudo viajar por aire y llegar en menos de una hora.
Como película cómica de cine mudo, el mandatario utilizó una camioneta Suburban, un jeep militar y un camioncito de redilas, pero la primera quedó varada pasando Chilpancingo en el kilómetro 320 (municipio de Juan R. Escudero) de la autopista bloqueada por deslaves; el segundo se atascó en el lodo a la altura del paraje conocido como Kilómetro 39, y el Presidente, con todo y cuatro secretarios de Estado, terminó usando un estaquitas Nissan para llegar por fin, y de noche ya, a la base naval de la Secretaría de Marina.
En el segundo atorón, el absurdo es de risa loca: varios militares trataron de sacar a pulso el vehículo, siendo que el jeep contaba con el dispositivo de acero que permitiría fuera remolcado por otro transporte que, carajo, no había.
Imprescindibles los medios de transporte aéreo: el EMP tenía Eurocopters EC 225 y Súper Pumas, los primeros con equipos para volar por instrumentos en condiciones atmosféricas de poca visibilidad y de comunicación de punta (y además se tienen los modernos Black Hawk). La logística incluiría otras aeronaves de avanzada y la elección de un sitio idóneo para aterrizar.
El Presidente volvió a Ciudad de México ese mismo día, ahora sí por helicóptero, y al otro día ya estaba increpando a los que lucran con la tragedia de Acapulco y presumiendo su popularidad en el mundo.
Pero viva la improvisación.
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